Vivienda indigna: la realidad de miles en Cataluña

https://album.mediaset.es/eimg/2025/02/04/imagen-de-archivo-de-bloque-de-viviendas-en-barcelona_12e6.jpg?w=1200

Un estudio reciente realizado por un par de instituciones de prestigio ha revelado el problema en aumento de la exclusión habitacional en Cataluña, enfocándose en la realidad de miles de individuos que se ven forzados a alquilar habitaciones sin contrato. Esta condición, en lugar de ser una solución temporal, se ha transformado en una opción permanente debido a la imposibilidad de encontrar una vivienda adecuada.

Un reciente estudio elaborado por dos instituciones de referencia ha puesto de manifiesto la creciente problemática de la exclusión residencial en Cataluña, centrándose en la realidad de miles de personas que se ven obligadas a vivir en habitaciones alquiladas sin contrato. Esta situación, lejos de ser una solución temporal, se ha convertido en una alternativa permanente ante la imposibilidad de acceder a una vivienda digna.

En 2023, más de 50,000 personas asistidas por las diez sedes de una destacada organización humanitaria en Cataluña residían en habitaciones arrendadas, un hecho que ilustra la gravedad del problema. Este tipo de exclusión habitacional impacta particularmente a familias monoparentales, jóvenes y migrantes, grupos que, debido a distintas circunstancias, son más susceptibles ante la crisis de vivienda.

La inestabilidad en el hogar no solo afecta la calidad de vida de los adultos, sino que también tiene efectos importantes en el crecimiento de los niños. Los niños que se crían en espacios limitados no tienen áreas adecuadas para jugar, estudiar o descansar, lo cual puede perjudicar su desarrollo emocional y cognitivo. Además, la falta de privacidad y las tensiones de vivir forzadamente juntos provocan un estado perpetuo de estrés y ansiedad, con consecuencias perjudiciales para la salud mental de toda la familia.

Uno de los encargados del estudio enfatiza la importancia de trasladar esta discusión al ámbito público para promover acciones que aseguren el derecho a una vivienda adecuada. Entre las soluciones sugeridas en el documento están la expansión del parque de vivienda social, la regulación del mercado de alquiler y la creación de incentivos para propietarios que brinden alquileres a precios asequibles. También se destaca la necesidad urgente de facilitar el empadronamiento y fortalecer las redes comunitarias para reducir el impacto del conocido «barraquismo vertical».

El director de una de las organizaciones participantes en el estudio urge a las administraciones a convertir la vivienda en un derecho real y no en un objeto de especulación. Es crucial asegurar lugares donde las personas puedan crear lazos, echar raíces en sus vecindarios y formar comunidad. No debemos aceptar que miles de individuos continúen viviendo en situaciones de inestabilidad y exclusión.

El director de una de las organizaciones implicadas en el estudio hace un llamamiento a las administraciones para que transformen la vivienda en un derecho efectivo y no en un bien especulativo. Es fundamental garantizar espacios donde las personas puedan establecer vínculos, arraigarse en sus barrios y construir comunidad. No podemos permitir que miles de personas sigan viviendo en condiciones de inestabilidad y exclusión.

La exclusión habitacional y social es una problemática compleja que demanda una respuesta integral por parte de las instituciones y la comunidad en su conjunto. Es crucial desarrollar políticas públicas que traten las causas estructurales de esta situación, fomentando el acceso a una vivienda digna y asequible para todos. Solo mediante un compromiso colectivo podemos asegurar que el derecho a la vivienda deje de ser un lujo inalcanzable y se convierta en una realidad para todas las personas.

Además de las acciones estructurales, es vital promover la concienciación y la solidaridad en la comunidad. Las redes de apoyo vecinales y las organizaciones sociales juegan un papel fundamental en la identificación y ayuda a personas en situación de vulnerabilidad habitacional. Fortalecer estas redes puede ayudar a reducir los efectos de la exclusión habitacional y facilitar la integración social de quienes se ven afectados.

La cooperación entre el sector público, privado y la sociedad civil es crucial para enfrentar esta problemática de manera efectiva. Es esencial formar alianzas que posibiliten la implementación de soluciones innovadoras y sostenibles, como el impulso de modelos de vivienda cooperativa, la rehabilitación de edificios vacíos y la creación de programas de alquiler social.

La colaboración entre el sector público, privado y la sociedad civil es fundamental para abordar de manera efectiva esta problemática. Es necesario establecer alianzas que permitan la implementación de soluciones innovadoras y sostenibles, como la promoción de modelos de vivienda cooperativa, la rehabilitación de inmuebles vacíos y la creación de programas de alquiler social.

En última instancia, garantizar el derecho a una vivienda digna es una cuestión de justicia social y respeto a la dignidad humana. Es responsabilidad de todos trabajar juntos para construir una sociedad más equitativa, donde nadie se vea obligado a vivir en condiciones de precariedad y exclusión.

Por Samuel Ardila Vásquez

No te pierdas estos